GRACIAS A NUESTROS TRABAJOS, BENDECIMOS A OTROS Y
NOS BENDECIMOS A NOSOTROS MISMOS
Todo lo que te venga a mano para hacer,
hazlo según tus fuerzas.
Eclesiastés 9:10
Por medio de nuestro trabajo,
la actividad creativa y el logro,
somos un canal a través del cual
la Energía del Infinito encuentra expresión.
Bien sea que trabajemos
en una oficina, en una fábrica, en una tienda,
en nuestra casa o en otro lugar,
el Espíritu de Dios obra
por medio de nosotros.
Con cada tarea, damos salida
a la actividad creativa del Espíritu morador.
Si nuestras actividades se vuelven difíciles,
respiremos profundamente y
hagamos una pausa para orar.
Recordemos que no somos nosotros,
sino Dios, quien hace la obra
por medio de nosotros.
Y luego regresemos a la actividad
"como nuevos".
Todo lo que hagamos,
veámoslo como una Bendición.
Gracias al Espíritu Divino,
nuestro trabajo nos vincula
con la vida y con los demás,
y revela nuestra naturaleza divina.
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